El pleno de la Asamblea Regional ha dado luz verde esta mañana a la modificación del artículo 8 de la Ley 4/2007, para que los Bienes de Interés Cultural de la Región de Murcia sean accesibles a todos los públicos, especialmente los que están cerrados.

Según ha explicado la diputada del Grupo Parlamentario Popular, Elena Ruiz Valderas, la modificación del artículo ha surgido “de la necesidad de impulsar y también concienciar que el patrimonio histórico-cultural murciano,tanto público como privado, especialmente debe estar abierto a todos los ciudadanos”.

De igual manera, ha señalado Ruiz Valderas, esta modificación “apunta a la corresponsabilidad de todos hacia los Bienes Culturales”, que “además de las obligaciones y compentencias de la Consejería del Cultura”, ha dicho la diputada ‘popular’, “también se encuentra la de los ayuntamientos y la sociedad en su conjunto que también debe ayudar a cuidar y velar por nuestro patrimonio cultural”.

Así, ha afirmado Elena Ruiz, el nuevo articulado de la ley “contempla el establecimiento de sistemas adecuados de acompañamiento y guía para facilitar que el acceso a los inmuebles que habitualmente no están abiertos al público”, y ha añadido que “se realice en condiciones que no supongan cargas adicionales para sus titulares”.

En este sentido ha indicado Ruiz Valderas que el cumplimiento de esta obligación “podrá ser dispensado total o parcialmente por la Consejería competente en materia de patrimonio cultural por causas suficientemente justificadas, siendo estas”, ha matizado, “controladas y reguladas para garantizar la accesibilidad a los Bienes de Interés Cultural”.

Además, “la accesibilidad al BIC no debe suponer un riesgo para los visitantes o incluso un problema para la conservación del mismo y tiene un horario estable, cuyas tasas de entrada repercute en la conservación, mantenimiento y gestión de las visitas”, ha manifestado la diputada.

Con esta modificación del apartado 8 de la ley pretendemos “una mayor accesibilidad de los Bienes de Interés Cultural de la Región de Murcia, una mayor corresponsabilidad en la conservación y disfrute del patrimonio, así como el desarrollo de una regulación por parte de la Consejería competente”, ha concluido Ruiz Valderas.